
Había una vez un perro que se creía el
dueño de todo. Al caminar por el rancho
decía: -¡Soy el más bravo y valiente
de aquí!

Se pasaba todo el día tirado de panza.
Y para divertirse, molestaba a todos
los animales.

Una mañana fue y le ladró a las
vacas, que asustadas tiraron la
leche.

Después se acercó a los cerdos y les
gruño tan fuerte que los pobres
resbalaron una y otra vez.

Al día siguiente, correteó al gato hasta
el palomar.
En el patio quedó el perro rodeado de
plumas y el gato colgando de una rama.

Por la tarde encontró a los guajolotes
comiendo en el corral.

Dio un gran salto y cayó sobre el
maíz. Fue tal el susto que los
guajolote chocaron unos contra otros.

Todos los animales querían desquitarse,
pero le tenían miedo.
Ya nadie salía a pasear.

Hasta una tarde, la gallina sacó a
comer a sus pollitos.

El perro apareció ladrando y la gallina,
en vez de huir, lo recibió a picotazos.

-¡A mí no me asustas gordo malora!-le dijo
muy enojada.
Adolorido, buscó dónde esconderse.
Y desde ese día no volvió a asustar a nadie.

Libro de lecturas de primer grado (el de la portada del perrito)
muy buena lectura me hace recordar viejos tiempos hace 14 añitos
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